Las calles de Puerto Ayacucho están adornadas de restos de cables cortados que cuelgan de los postes de distribución de energía eléctrica y de CANTV. El corte de cables continúa y no hay autoridad que haga NADA al respecto. Hace días se llevaron nuevamente más de 300m de una urbanización y el robo de tramos más cortos es casi a diario. Se ha denunciado muchas veces que pueden verse cables cortados frente a las instituciones militares, policiales y gobernación del estado. Muchos usuarios ya ni sueñan con Internet por esa vía, por wi-fi el servicio es muy lento e increíblemente intermitente. Los "linieros" de CANTV no dan abasto reponiendo los gruesos cableados para que se los roben en pocos días o colocando cables de empate individuales que también son robados o desconectados.

Caracas en la inopia, llaman a los usuarios después de tres años para preguntarles si ya les restablecieron el servicio que se paga sin recibirlo (la tarifa básica) con la esperanza de que no les quiten la línea y algún día lo restablezcan.

Los vecinos afirman que la mayoría de los robos lo ejecutan hombres armados con las caras cubiertas por pasamontañas, con vehículos y potentes cizallas que cortan los cables y las guayas; en diversas ocasiones se han cansado de llamar a todos los cuerpos de seguridad sin que ninguno haya hecho presencia cuando está ocurriendo el vandalismo y la verdad es que siempre ocurre de noche, en especial si está cayendo una fuerte lluvia, y es en la noche cuando todo es más vulnerable, pues desde hace mucho no existe presencia de los cuerpos de seguridad en esas horas, la vigilancia nocturna desapareció, ya no es como antes, las franquicias de extorsión, mal llamadas "alcabalas", solo funcionan de día, como cualquier comercio. Cuando los vecinos han logrado atrapar a pequeños ladrones de cables, éstos han sido liberados en minutos no sin antes dejarle el rollo de cable a los guardias.

Todos saben a dónde van a parar los materiales "estratégicos", estratégicos para otros países, porque aquí nadie los protege. Todas las autoridades saben el daño que ocasionan esos robos: destrucción de la red de servicio de CANTV, pérdidas millonarias en divisas por esa vía, negación del servicio –trabajo, educación, información, red social, entretenimiento-- a la gran mayoría de la población, inutilidad de muchos puntos de pago electrónico, obligación a los ciudadanos de usar el nuevamente muy escaso efectivo que pareciera ser retenido por los mafiosos de los bancos públicos y privados. Todos sabemos a quienes benefician estos robos: A los traficantes de materiales estratégicos, a los enemigos del país, a los corruptos de las instituciones de seguridad, a los que se dedican al sabotaje, a quienes requieren gran ancho de banda a expensas de que pocos o nadie se conecte (¿Granjas mineras?).

¿Y qué hace el gobierno? (¡NADA!) Al gobierno le gusta que lo saboteen porque pareciera definitivamente que le agrada que el pueblo pase trabajo y que los delincuentes que ocupan las instituciones sigan en la fiesta de la delincuencia oficial. ¿O será que es verdad lo que se dice, que el gobierno quiere tener un pueblo humillado y arrastrado para garantizar la continuidad de las mafias o bandas de delincuentes en el poder? El gobierno con sus servicios de inteligencia es bueno arrestando, matando, torturando, desapareciendo y dejando detenidos a jóvenes manifestantes con boleta de excarcelación, pero no hace (¡NADA!)100 contra estos delincuentes-saboteadores porque según, ya la mayoría afirma, es el mismísimo gobierno el que hace eso. Me recuerda épocas pasadas y nada superadas en que nos preguntábamos ¿Porqué el gobierno encarcela, tortura y desaparece a los militantes de izquierda y trata con guantes de seda a las grandes mafias del narcotráfico?

¿El gobierno va a defender la Patria de una hipotética intervención extranjera, pero no ha podido resolver en más de cinco años el problema de las bandas del cobre, de las mafias que han tomado todos los bancos, o de los saboteadores, en una de las capitales de estado más pequeñas del país? ¿No les informan lo que REALMENTE OCURRE EN LA FRONTERA?

Este "sabotaje" es muy extraño, realmente.

Juan Noguera